Deja que se deslicen,
bailen,
se cansen
y hagan material lo que fue una vez pensado.
Aquellas que por miedo sueltan
o cogen con tanta fuerza
que transmiten el dolor de dentro.
Deja que lea las palabras
que quedan atrapadas en tus dedos,
ahora tienes muchas marcas,
no se pueden camuflar..
No me hace falta leer tus manos,
ya no .
Perderé,
pues mi fuerza reside en las mías,
ya que no pueden llorar
o eso creía hasta ahora.
Ya no conozco el lenguaje de tu cuerpo,
tampoco me hace falta
para saber
que en tu nuevo idioma
"nosotros " no está definido.
No creo que lo veas conveniente.
Has encontrado nuevos mundos
donde yo no resido en ningún lugar.
Nuevos hogares
más cálidos.
Futuros acompañados contigo.
Árboles que ya no refugian a fugitivos.
Letras de autoayuda.
Mentiras piadosas.
Pero al menos admite,
que era divertido
intentar escapar de la realidad
cuando inventamos nuestra manera de comunicarnos
sin mencionarnos.
Por miedo a que nos entendiesen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario