Llueve.
Y mira al suelo, porque nunca ha tenido el valor de mirar a alguien que llora.
Camina solo,huyendo de ella cuando en verdad quiere encontrarla.
"Me he perdido"-suelta, como si le hubiese costado la vida admitirlo.
"¿Puedo ayudarte?"-Dice una voz detrás.
Le mira sorprendido y niega con la cabeza.
Ella decide no rendirse.
"Si te has perdido puedo guiarte, conozco muy bien esta ciudad"-dice con una sonrisa.
"Déjalo, ya no tiene solución"-.
Vio que ella no entendía y decidió explicarle lo que realmente pasaba, porque sabía que no iba a volver a verla.
"Mira,no creo que entiendas lo que es estar realmente perdido, no es algo que ocurre de repente sino poco a poco".
Ella se quedó mirándole fijamente como aprobando que continuase.
"Al igual que conocer a la gente, puedes hacerlo de verdad o solo por encima"
"Vale y ¿Cuál es el problema?"-le preguntó.
"El problema llega cuando conoces a alguien que te conoce más que a ti mismo y te enamoras porque sabes que con esa persona puedes estar seguro cuando no confíes en ti mismo y no sepas qué hacer".
"Pero...¿Eso es bueno no?..,es decir, por fin has encontrado lo que todo el mundo busca"-le dijo ella.
"Te equivocas" dijo pensando y muy serio.
"Tú sabes que las personas son libres,no son objetos que puedes encerrar en una caja y guardarla en el rincón que tu quieras, pues ese es el problema, que se van y vienen cuando quieren y a veces se van porque simplemente tú las hechas porque crees que es lo correcto pero claro, no lo sabes porque en verdad esa persona es la que te conoce realmente pero como hasta dudamos de la propia verdad, no hacemos caso a los consejos que nos dice y continuamos cagandola".
"Entonces no te has perdido, le has perdido"-le dijo ella dudosa.
"Sí pero eso implica que me pierda yo".
"Pues búscale y encuentrate"-dijo con voz dulce, "seguro que sabes dónde está".
"Puede ser, pero seguramente no quiera verme,es una consecuencia de conocerme".
"¿Le miraste?".
"¿Cómo?"-dijo desconcertado.
"Cuando se fue".
"Ah, sí".
"Ahí tienes la respuesta"-le dijo- "seguro que le miraste como miras a la vida,pasando delante tuya y tú sin reaccionar".
"No me conoces, no puedes decirme eso".
"No te conoces ni tú mismo,lo has dicho hace nada,tienes miedo de estar bien porque hace tiempo que no conoces esa sensación y como crees que todo lo bueno no puede pasarte a ti piensas que algo va mal y alejas de ti a lo que realmente te está salvando y crees que es indestructible pero los flotadores se pinchan y cuesta arreglarlos".
"¿Qué quieres decirme con eso?"-le preguntó enfadado.
"Que dejes de quejarte tanto y reacciona aunque sepas que hay una posibilidad de perder, a ver si por una vez haces algo que no se espera alguien que te conoce".
Se quedó callado y finalmente dijo"¿Sabes? Se me ha olvidado decirte que yo también le conozco más que a sí misma y sé que por muchas veces que la cague estará ahí siempre y eso es de lo que tengo miedo, de que me equivoque y no tenga castigo, así nunca aprenderé"
"Pues te voy a decir lo que pienso, creo que los dos estáis perdidos en el mismo sitio".
Dicho esto se levantó, cogió su paraguas y miró el cielo, luego se despidió del chico, no quiso saber su respuesta porque prefirió no conocerle.